Final Fantasy X/X-2 HD Remastered – La reseña

Una de las mayores críticas a la PlayStation 4 es su “carencia” de juegos, especialmente en estos momentos en los que Sony ha lanzado con recurrencia remasterizaciones HD de títulos que han salido en PlayStation 2 y PlayStation 3. Por parte de Square Enix hemos visto el compilatorio de Kingdom Hearts, sin embargo, parece que muchos estaban a la espera de la remasterización de dos de los títulos que marcaron una época para los fans de Final Fantasy.

Final Fantasy X/X2 HD Remastered llegó, relativamente, hace poco al mercado y con ello la historia de amor entre Tidus y Yuna. He de decir que al principio fui escéptico a la hora de hacer esta reseña, sin embargo, más de 100 horas de juego me han hecho darme cuenta de que estos son títulos únicos con una esencia particular; si bien no ofrecen una experiencia diferente a como lo ofrecieron en el 2001 y 2003, sin lugar a dudas es una vivencia que vale la pena recrear con lo mejor de la tecnología actual.

Aquellos que conozcan con precisión la franquicia sabrán qué Final Fantasy X fue el último título de SquareSoft antes de convertirse en Square Enix, así como que el primer título producido por esta nueva compañía fue Final Fantasy X-2, la primera secuela en la historia de este emblemático RPG japonés. Ambos lanzamientos marcaron una época importante para lo que significaba un Final Fantasy, después de todo, fue el momento en que comenzaría una nueva fase de dirección que experimentaría con nuevos sistemas de combate e historias.

Entrar en detalle sobre el argumento de ambos títulos es algo que no voy a hacer, después de todo, no es fácil resumir en un par de líneas de qué tratan, sin embargo, sí puedo decir a grosso modo que Final Fantasy X es una de las más trágicas historias de amor vistas en la franquicia y que Final Fantasy X-2 es una secuela con un gran sistema de combate, pero con una historia que deja mucho que desear.

Lo primero a evidenciar en Final Fantasy X/X2 HD Remastered es el aspecto gráfico. Evidentemente, la tecnología actual permite que los escenarios, personajes y cinemáticas se vean mejor para ambos títulos, no solo ahora los contornos están bien definidos, sino que cuentan con una paleta de color más viva que la vista en PlayStation 2. En general la apariencia es más que impecable, aunque a veces estos arreglos pueden evidenciar ciertos errores que pudieron pasar desapercibidos hace décadas, como elementos sin volumen en una que otra secuencia.

El apartado sonoro también fue modificado, no en tanto a los efectos de combate o voz, sino de la banda sonora para Final Fantasy X/X-2. A la hora de comenzar el juego, los usuarios, podrán escoger qué prefieren, la composición original vista en la PlayStation 2 o la que fue arreglada para esta versión lanzada en PlayStation 4. Aunque estoy casi seguro de que muchos prefieren la original por nostalgia, la nueva versión no se queda atrás ya que todas las tonadas tienen más fuerza, lo que la ha hecho mi favorita.

Al ver las mejoras hechas a ambos títulos es evidente que el mejor trato lo recibió Final Fantasy X, puede que sea porque es el más antiguo o porque es el preferido por los fans, pero este juego fue el que más se benefició de su llegada a la PlayStation 4. Esto no quiere decir que Final Fantasy X-2 no sea una buena remasterización, solo que su contenido es inferior con respecto a su predecesor limitándose solo a la mejora visual y sonora.

Para los que puedan dudar sobre adquirir este paquete hay que aclarar un par de cosas. Primero que todo, las versiones de Final Fantasy X y Final Fantasy X-2 que vemos en esta remasterización corresponden a la Internacional, es decir, una versión exclusiva para Japón que de por sí tiene más contenido que el juego original, lo que se traduce en nuevas habilidades, mejoras en el sistema de combate y peleas adicionales. Lo segundo a tener en mente son dos “expansiones” que nos dejan entender a profundidad el desenlace de los dos juegos.

Si ustedes son de los que se preguntaron ¿qué llevó a Yuna a cambiar su atuendo y partir en busca de Tidus?, es mejor que se preparen porque esta y otras preguntas se responden en Final Final Fantasy X: Eternal Calm, un corto de no más de cinco minutos que sirve a modo de prólogo de Final Fantasy X-2 y que nos deja ver lo que le sucede a la protagonista y su motivación para partir en una nueva aventura. Por otra parte, encontraremos Final Fantasy X-2: Last Mission, una corta aventura que nos lleva tres meses después del juego en la que se nos presenta un nuevo dilema, solo que esta vez no uno en el que esté en disputa la existencia de la humanidad, sino la amistad de las tres protagonistas.

No cabe duda de que estos dos capítulos adicionales en la historia nos ayudarán a profundizar en el argumento, al menos tratando de dar más sentido a lo que sucede a lo largo de Final Fantasy X-2. Puede que en tiempo Final Fantasy X: Eternal Calm y Final Fantasy X-2: Last Mission no hagan mucha diferencia; sin embargo, si hay que tener en mente que ambos títulos no son cortos, por lo que aun después de terminados se podrá extender nuestra estadía en Final Fantasy X y Final Fantasy X-2.

Al ver esta remasterización en HD no me cabe duda de que es un artículo de colección para los fanáticos de Final Fantasy, especialmente si esta saga es su favorita. Es difícil recomendárselo a otras personas salvo que sea por nostalgia ya que este par de RPG pertenece a una época diferente al rumbo que tomó la franquicia hoy día, aunque eso no es un impedimento para que nuevos gamers se adentren en dos de los títulos que más causaron discusión entre el 2001 y el 2003.

Reseña hecha con la copia de Final Fantasy X/X-2 HD Remastered para PlayStation 4 brindada por Square Enix.