The Town of Light – La reseña

Antes de empezar a jugar The Town of Light estaba esperando una cosa completamente diferente a la que me encontré a lo largo de este título de LKA it. Este juego había sido clasificado dentro del género terror psicológico, pero está muy lejos de ser una aventura llena de los clichés y las herramienta más usada en este tipo de videojuegos: los jump scares. Este es un juego de terror psicológico, literalmente. El equipo de LKA it hizo una muy completa investigación acerca de los asilos mentales en el siglo 20 y el tratamiento que sufrían los pacientes en esos lugares, que en muchos casos eliminaba todo rastro de cordura que pudiera haber en ellos.

The Town of Light tiene como principal y única locación en Hospital Psiquiátrico Volterra (es un lugar real) el cual fue clausurado por orden del gobierno italiano a finales de los años 70, donde estuvo recluida Renée, una joven de 16 años quien fue remitida al lugar por presentar síntomas de un trastorno mental, ella es un personaje ficticio que el jugador controla. En el juego Renée vuelve a un edificio en ruinas, que alguna vez fue el hospital Volterra con el objetivo de recuperar los recuerdos de lo que allí le sucedió.

La aventura comienza cuando Renée entra al edificio, el jugador debe seguir las instrucciones de la voz interna de la chica, que le indica constantemente qué hacer y a dónde ir, en caso de olvidarlo se puede oprimir «H» para volver a escuchar la instrucción. El jugador debe caminar por los diferentes pabellones del lugar y encontrar varios objetos que ayudarán a Renée a tener flashbacks y así recordar lo que le sucedió. Los objetos distribuidos en el hospital, papeles, cartas, archivos, una muñeca, no tienen otra función que ayudar a que la historia se desarrolle.

Estamos en presencia de otro de esos «walking simulators» un género en aumento de cuya existencia no me había percatado hasta hace muy poco. No hay mucho que el jugador pueda hacer para cambiar la historia de la chica salvo en un par de momentos en dónde hay que escoger una frase para decirle a Renée dentro de varias opciones, el final del juego depende de lo que se decida en esos momentos, por lo tanto hay más de uno.

Hay un par de desaciertos técnicos que impiden disfrutar al máximo The Town of Light, por ejemplo; hay varios objetos en todo el hospital que se pueden coger y mirar, pero no sirven para absolutamente nada, la actuación de voz en el doblaje en inglés es muy mala, tanto que preferí cambiar al idioma original que es el italiano porque no soportaba la actriz del inglés, el movimiento del personaje no se siente natural, la velocidad a la que avanza, es más rápida que el sonido de sus pasos y el cursor es casi imposible de ver cuando se posa sobre superficies muy claras.

La historia de este título es una de las cosas mejor logradas, no es nada predecible, el jugador pasa a ser espectador en varias ocasiones mientras Renée relata su historia, las situaciones que vivió en ese lugar parecen realmente aterradoras, no es necesario ningún acontecimiento paranormal para estremecer al jugador, para sentir miedo es suficiente con imaginar el infierno por el que muchas personas en casos similares tuvieron que pasar debido a la precaria evolución de las ciencias de la salud mental en esa época. Las cinemáticas que fluctúan entre animaciones 3D y particulares ilustraciones en dos tonos, que acentúan las sensaciones que la narración evoca.

Sin duda uno de los aspectos que más marca la atmósfera desoladora es la construcción de los escenarios, el nivel de detalle es muy bueno, se nota el desgaste y el paso del tiempo en las paredes, la oxidación del metal, la descomposición del lugar en general. Una investigación de campo muy bien hecha por parte del equipo de desarrollo.

El juego tiene una forma muy práctica de llevar nota de las cosas relevantes para la historia que se van encontrando, un menú muy sencillo con las experiencias, las memorias y los archivos médicos. El sonido de The Town of Light está bien hecho, no es algo que se destaque por ser magistral ni algo totalmente horrible, es un sonido ambiente adecuado, lo suficiente como para mantenerte concentrado en la historia, con uno que otro efecto musical para aumentar el suspenso en algunas situaciones.

Reseña realizada con una copia de The Town of Light en su versión de PC provista por LKA it.