Conecta con nosotros

Videojuegos

La verdad oculta sobre la Princesa Peach

Un punto de quiebre en el delicado eslabón que une el ‘lore’ del “Marioverso.”

Publicado

el

¿Cómo puede el Reino Champiñón tener una humana como princesa?

No la tiene.

Pauline es la originalmente damisela en peligro y actual alcaldesa de New Donk City que hizo su debut junto con Donkey Kong (Cranky) y Jumpman (futuro Mario) en el primer juego de la terna. No sería sino hasta Super Mario Bros que conoceríamos a la Princesa Toadstool, nombre acorde para una figura de la realeza hija del Rey Champiñón, de cabello castaño en la trilogía original debido a las limitaciones del NES. Imagen que se replicaría en la serie animada.

A partir de Super Mario World su cabello se mostró rubio en los juegos tal como en el arte de los mismos, pero fue a partir de Super Mario 64 que el nombre de Peach comenzó a tomar relevancia y terminó por reemplazar al de Toadstool, quitando la poca relación directa que le quedaba a la princesa con los hongos. Incluso su propio juego para DS se llamó Super Princess Peach. Radical.

Es cierto que la mitología o el ‘lore’ del universo de Super Mario Bros es uno que no tiene mucho sentido, si nos podemos a analizar la cantidad de juegos principales y series subalternas deportivas, o cualquier otra especie de géneros en los que han incursionado Mario Mario y Luigi Mario. Pero que una aparente humana Peach fuese la princesa del Reino Champiñón durante más de tres décadas era algo que seguía sin tener sentido, hasta la llegada de Peachette.

New Super Mario Bros. U Deluxe para Nintendo Switch introdujo este nuevo personaje que aparece gracias al poder de la ‘Súper Corona’, cuya faceta revolucionó no solo el estilo de juego –ya que puede hacer doble saltos, flotar en el aire por un corto tiempo y ejecutar un rebote antes de caer a los abismos–, sino que hizo temblar los cimientos del “Marioverso.”

Según aquella revelación, Toadette, una figura femenina del Toad que conocemos de toda la vida introducida en Mario Kart: Double Dash!!, puede convertirse en Peachette al obtener una súper corona. Del mismo modo que Mario se convierte en Super Mario al obtener un súper hongo. Mientras que la mayoría de jugadores lo vieron como una correlación sin sentido y hasta forzada para meter a Peach y Toadette en un dos por uno, puede haber una verdad oculta de fondo: la Princesa Peach no es humana, sino otro hongo femenino pero evolucionado.

Reyes de los diferentes mundos del Reino Champiñón según Super Mario Bros. 3. El tercero luce sospechosamente familiar…

Es muy parecido al concepto de ciencia extraña que maneja Pokémon, pero también ligado al reino de las hormigas por poner un ejemplo, donde su reina difiere de los soldados o trabajadores en aspecto y tamaño, pero sigue siendo hormiga. Claro, sería difícil creer que la madre de Peach o Reina Champiñón no se vea nunca porque vive encerrada en una cámara dando a luz a miles de Toads…

Pero en lo que respecta a Peachette, la lección que nos deja es que Peach comparte el mismo “ADN” o cadenas de absorción como buenos heterótrofos (no tienen clorofila) que son los hongos. ¿Por qué todas las Toadettes no crecen hasta convertirse en otra Peach? Porque no pueden y alguna sangre extraña de la realeza debe correr por sus… lo que tengan por venas. La súper corona lo único que logra es liberar temporalmente sus poderes evolutivos no aptos para plebeyos.

Otro asunto aclaratorio es que Peach no era de bebé una Toadette, tal como puede verse a la debutante Baby Peach (y Wario y DK) en Yoshi’s Island DS. La familia real del Reino Champiñón ciertamente pueden ser hongos humanoides y de ahí la existencia de Peachette, una Toadette que puede soñar con evolucionar así sea por poco tiempo. La naturaleza mística y orgánica de las súper coronas es otro asunto, igual con los súper hongos, en lo que esperamos no sean cabezas de cientos de Toads fallecidos lo que comen los hermanos Mario.

El “Marioverso” es todo un misterio, un cúmulo de secretos y verdades liberadas a medias que toman por sorpresa a los jugadores entre canon y suposiciones. Por eso no debería extrañarnos que la rubia princesa de toda la vida nunca haya sido humana sino un hongo más, pero con mejor estatus y seguridad social.

Y no, no vamos a mencionar a Bowsette. Rayos.

Haga clic para comentar

Deja tu comentario

Además no te pierdas