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Buscando a Dory – La reseña

La amiga del padre de Nemo recibe su propia aventura y una resolución a su enigmático pasado.

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La primera vez que escuché que Disney Pixar iba a hacer una secuela de su película Buscando a Nemo, confieso que me causó cierta inquietud, pues todos sabemos que en algunas ocasiones las segundas partes no resultan tan buenas como las primeras. Sin embargo, cuando anunciaron que esa segunda película iba a girar en torno a Dory y la historia de sus orígenes, mis expectativas crecieron exponencialmente, como las de muchos fanáticos de este carismático personaje. Me alegra decir que Pixar no nos ha decepcionado, y les explicaré por qué.

La razón por la cual el director Andrew Stanton decidió lanzar una secuela 13 años después de haber estrenado Buscando a Nemo, fue porque la volvió a ver en el 2011 y sintió que el personaje de Dory necesitaba un cierre, pues en su personalidad había influencia de varios asuntos sin resolver de su pasado.

En Buscando a Dory acompañamos a la simpática pez cirujano regal (o paleta de pintor) en la incansable búsqueda de sus padres al otro lado del océano. No hacen falta sino 10 minutos de película para sentir que nos han tocado las fibras más sensibles, ya que vemos a una Dory bebé exageradamente tierna, compartiendo con sus padres quienes tratan de enseñarle, con una paciencia que sólo un padre puede tener, a lidiar con su problema de pérdida de memoria a corto plazo.

Un día Dory se separa de ellos sin querer y olvida cómo volver a casa. Una bella pero triste secuencia nos muestra cómo Dory se hace adulta buscando por el océano y preguntando a todo pez que ve, por su familia, hasta que se encuentra con Marlin, que está desesperado buscando a su hijo Nemo. Ver el momento exacto en que las historias de estos dos personajes se cruzan provoca una gran nostalgia.

Un año después de su aventura narrada en Buscando a Nemo, Dory encuentra un lugar estable junto a Marlin y su pequeño hijo, pero una noche, una serie de recuerdos confusos llegan a su mente y le crean la imperiosa necesidad de encontrar a sus padres. Dory y sus amigos cruzan el océano hasta llegar a La Joya de Monterrey California, un Instituto de «rehabilitación» para peces enfermos en donde podrían estar sus padres.

FINDING DORY – Marlin and Nemo get guidance from a pair of lazy sea lions in an effort to catch up with Dory. Featuring Idris Elba as the voice of Fluke and Dominic West as the voice of Rudder, "Finding Dory" opens on June 17, 2016. ©2016 Disney•Pixar. All Rights Reserved.

El desarrollo de los personajes en ésta película está muy bien logrado, ya que tienen aspectos muy marcados de la personalidad humana, cada pez tiene un gran defecto que lo detiene, y no lo deja lograr lo que quiere, pero Dory siempre es el elemento que impulsa a todos a dejar atrás sus prejuicios y a vencer sus temores. Sin embargo, ella misma debe enfrentarse en esta película a su gran problema, que es la pérdida de memoria, la cual la pone en peligro y muchas veces se interpone en su amistad con Marlin. Solamente con el cariño y la paciencia de sus amigos, y de algunos aliados que encontrará en el camino, podrá lograr aceptarse a sí misma.

Todos estos matices de cada uno de los personajes demuestran su tridimensionalidad, hasta los menos importantes sufren una transformación a lo largo de la historia. La fotografía y dirección artística en esta cinta muestran la profundidad de investigación que el equipo de estos dos departamentos hizo para lograr recrear el mar, y la diversidad de ecosistemas que existen dentro de el mismo. Adicionalmente, la evolución en los programas de modelado y técnicas de animación por computador le sientan muy bien a esta película y le agregan un toque de realismo del cual no pudo gozar la primera entrega.

Las paletas de color, aunque se mantengan arraigadas a los tonos azules por el claro contexto del filme que se desarrolla en el mar, cambian de acuerdo al tono dramático de la escena. Por ejemplo, en una ocasión, cuando Dory se encuentra sola y el panorama se torna oscuro, los colores cambian hacia un verde opaco, que da la sensación de desolación y desasosiego que experimenta.

Buscando a dory (3)

El diseño de sonido en Buscando a Dory es realmente impresionante, el nivel de detalle que existe en el sonido ambiente, la manera en que las voces de los personajes cambian dependiendo el ambiente en que se encuentren y la actuación de voz (con la voces originales de la primera película), demuestran la calidad de la que siempre ha hecho gala el estudio Pixar. La banda sonora por su parte, compuesta por Thomas Newman, acompaña a la perfección cada momento de la película, desde los más alegres hasta los más tristes.

Aparte de la banda sonora compuesta para la cinta, también escuchamos un par de canciones de jazz interpretadas por grandes músicos. La canción oficial de Buscando a Dory, Unforgettable, es un cover de la canción de Nat King Cole y la interpretación de Sia simplemente pone la piel de gallina. Al igual que una de las canciones que acompaña la escena en donde Dory y su cómplice caen al mar en slow motion, What a Wonderful World de Louis Armstrong.

Esta película, como casi todas las de Disney, nos deja una gran variedad de enseñanzas para la vida que no se limitan a los más pequeños. Muchos aspectos de la personalidad de Dory, nos motivan a evaluar nuestras actitudes frente a los problemas que se presentan en nuestra vida y la manera de abordarlos que tenemos, a veces vemos nuestros defectos reflejados en algún personaje y nos damos cuenta lo perjudiciales que pueden llegar a ser.

Buscando a Dory es una cinta dirigida tanto a niños como adultos, sobre todo porque los que vimos Buscando a Nemo ya no somos tan pequeños. El humor es bueno, varias escenas sacan una gran carcajada a sus espectadores, pero así mismo pueden llegar a producir una que otra lágrima. Un plan obligado para quienes recuerdan con cariño la primera película y quieren volver a acompañar a estos simpáticos personajes en sus aventuras.

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